Si has tenido un problema con el pago de alguno de tus envíos, puedes pagar tu importe pendiente sin iniciar sesión. Solo tienes que ingresar el número de contrato de 13 dígitos que figura en la factura, carta o e-mail recibido con los detalles de tu suscripción.
Si has tenido un problema con el pago de alguno de tus envíos, puedes pagar tu importe pendiente sin iniciar sesión. Solo tienes que ingresar el número de contrato de 13 dígitos que figura en la factura, carta o e-mail recibido con los detalles de tu suscripción.
¡Edición exclusiva! A finales del siglo pasado, el reglamento de los rallies permitió que coches de dos categorías diferentes, los WRC con motor turbo y cuatro ruedas motrices y los Kit Car de tracción delantera y motor atmosférico, llegaran a igualar sus prestaciones, sobre todo en los rallies de asfalto, donde la tracción integral no era un factor decisivo y donde la ventaja de peso de los Kit Car, más de 200 kilos más ligeros, los favorecía.
Unidades limitadas. En 1999 esta situación llegó a su punto álgido. Philippe Bugalski, con un Citroën Xsara, sin duda el más evolucionado y competitivo de los Kit Car, se impuso en el Rally de Cataluña y, dos semanas después, en el Tour de Córcega, por delante de los WRC. Bugalski, campeón de Francia con ese coche, compartió equipo con el campeón de España Jesús Puras. El cántabro fue el más rápido en Cataluña mientras estuvo en carrera, pero tuvo que abandonar por una avería en la bomba de gasolina cuando marchaba en cabeza. En Córcega, pese a correr en un terreno que Bugalski conocía como la palma de su mano, Puras consiguió tiempos similares y llegó a situarse a solo seis segundos del francés, a falta de tres tramos, antes de que las órdenes de equipo le obligaran a respetar las posiciones para no poner en peligro el inesperado doblete de la marca. Puras obedeció y acompañó a Bugalski en el podio. ¡No te quedes sin tu miniatura!
España
Brasil
Portugal
Argentina
México
Perú
